No es que no la quiera escuchar. No es que no la entienda, o que no comparta su angustia. Tampoco creo que esté equivocada, o la culpo por exigirme ahí. No la considero tonta, ni demente, ni ambigua. No me siento ajena a sus sentimientos, ni la desconozco por ellos. Entiendo la bronca, el enojo y las ganas de asesinar.
Pero es que estoy completamente segura de que no se merece perder todo este tiempo. Es sólo que no importa cuánto la escuche, ya no tengo más para decir.
Y es que estoy segurísima de que no me merezco perder todo este tiempo. Pero no importa cuánto me escuche, ya no tengo más para decir.
5 comentarios:
Encontrándote con vos misma?
tu conciencia t ta quemando el bocho?
Hay que tener paciencia, porque si hay algo que les pasa a las palabras es que se erosionan. Y después viene ese silencio que es el permiso para olvidar.
problemas de esquizofrenia?, tengo unas pastillas para eso por algún lado si querés...
Lola: No, solo me recuerda que existe
Mabel: Es tener paciencia o desesperar. Y la segunda no me convence
Cuello: Sí, quiero.
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